lunes, 22 de enero de 2007

Los vecinos de Santa Catalina acusan al Concello de dejadez frente al `botellón´

Los vecinos y comerciantes de la plaza de Santa Catalina están dispuestos a tomar medidas jurídicas para poner fin a los actos vandálicos y a la inseguridad que sufren todos los fines de semana como consecuencia del botellón.

El día 6 de junio del año pasado el alcalde, Javier Losada,prometió a los residentes en la zona una reunión para tratar el asunto, pero a día de hoy todavía no los ha recibido. "No creemos para nada en el Ayuntamiento, estamos frenéticos contra él porque pasa olímpicamente. No le importa para nada la situación tan desesperante que estamos viviendo", denuncia una de las vecinas de la plaza.

Portales vomitados y orinados, pintadas en las paredes, destrozos en el mobiliario urbano, ascensores rotos son algunas de las consecuencias del botellón que sufren los vecinos todos los fines de semana. El problema, según aseguran, no es que los jóvenes se reúnan a beber en la plaza, sino los actos vandálicos que cometen. "Beber en la calle no está prohibido, pero cometer destrozos contra propiedades públicas y privadas sí. Además, hay cantidad de menores bebiendo. La situación empeora día a día porque cada vez hay más gente violenta en la zona", subrayan.