Santa Margarita, el pulmón verde coruñés
«Vivir aquí es una maravilla», esta frase es una de las que más repiten los vecinos del barrio de Santa Margarita. Tienen de qué presumir, ya que cuentan junto a sus casas con el pulmón verde de la ciudad, un gran parque de 86.000 metros cuadrados con frondosos árboles, en el que también está la Casa de las Ciencias.
La mayoría de los residentes piden desde hace más de una década que cierren este recinto por las noches para evitar el vandalismo, y en la actualidad demandan que haya más césped y menos cemento en sus caminos.
Rodeados de tráfico
Pero en el barrio de Santa Margarita, en el que viven más de 15.000 personas, no todo es naturaleza y aire puro. Nada más cruzar las puertas del parque, por cualquiera de sus salidas, los vecinos se encuentran con el denso tráfico de las avenidas de Arteijo y Finisterre y la ronda de Nelle. De hecho, según explica la presidenta de la asociación de vecinos, Paloma Díaz, la creciente llegada de coches provoca que las plazas de aparcamiento sean cada vez más escasas. «Las de residentes casi no existen y para alquilar los precios no bajan de los 100 euros al mes», afirma.
Su proximidad al centro ha elevado también el coste de las viviendas e incluso las más viejas y para reformar son inalcanzables. «Las venden por 300.000 euros las de segunda mano», explica la representante vecinal.
Adiós definitivo al viaducto
El derribo del viaducto de la ronda de Nelle será uno de los cambios más importantes que sufra el barrio de Santa Margarita en los próximos años. El Ayuntamiento ha presentado un proyecto inicial que opta por llevar el tráfico por un túnel subterráneo, aunque muchos vecinos prefieren que se regule la circulación mediante semáforos.